Vorágine

Aunque con los tiempos que corren los mercados no están a tope, el mío personal no se puede decir que esté parado, y a pesar de que como bien decía mi profe y amigo Demetrio Navaridas "no se vende un cuadro...", este que os presento hoy me ha servido para pagar una deuda de 1.300 €, que ya está bien.
Este señor cuadro (1 x 1 metros si la CPU no me falla) está realizado en acrílico sobre un lienzo y está inspirado en la técnica del señor Jackson Pollock, expresionista abstracto y muy americano él, siempre me ha fascinado por su original manera de pintar, goteando pintura sobre el soporte.
Nunca había experimentado con esta forma tan peculiar de trabajar y puedo asegurar que he disfrutado como un enano, y aunque mi intención primera no era la de emular a Jackson lo cierto es que la espiral si que estaba en el concepto previo, así en el proceso que empezó siendo un trabajo de caballete con pinceles, terminó sobre el suelo del taller y pintando con las manos, para acabar lanzando la pintura de nuevo con pinceles dejandola caer como hacía mi referente. Lo que seguro que no usó Pollock es la gama cromática que ultimamente me persigue donde quiera que vaya, y esque es difícil separarse de ello sino es de forma consciente e intencionada, y como la intención es tan importante como la improvisación ahí queda eso.
Ahora, se me han puesto los dientes largos y estoy investigando un poco más este lenguaje pero siempre buscando expresiones cercanas a mi ser, que es al fin y al cabo quien lo cuenta.